Una vez invitaron a la tortuga a una fiesta.
Muy contenta, la tortuga se lavo y se perfumo,
Se pinto los labios y se puso un collar.
Después salio de casa, y despacio, despacio, se fue
Caminando. Llego al lugar de la fiesta y comenzó a subir
La escalera. Siete años tardo en llegar arriba, y
Cuando ya pisaba el último escalón, se resbalo y cayó rodando, escaleras abajo. Y mientras ella caía, alguien le oyó decir:
--¡Malditas prisas! La próxima vez que me inviten
Caminaré despacio
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